21 ene 2021

Complaciente

Complacer.

Que alivio dejar de hacer cosas por complacer a otros.

Tenemos arraigado ese sentimiento de culpa que surge al pensar que si somos honestos con alguien y decimos NO, no quiero, no me gusta, no me hace sentir bien, no me interesa, vamos a ofender o hacer sentir mal, ‘quedar mal’ o no ser bien vistos.
De aquí parten muchas veces las personalidades débiles y terminamos con un ¿Qué van a decir de mi?
Este miedo nos arrastra a repetir una y otra vez  caer en la complacencia.
En un mundo donde el like vale mas que una opinión sincera, los miedos a la aceptación permanecen a flor de piel.
Cuando voy a las redes sociales si algo no me gusta, tal vez no lo critico pero tampoco necesito regalar ese like para hacer sentir mejor a otros.
Esa incoherencia termina haciéndonos daño a nosotros y al resto, terminamos dudando de nuestra opinión y no hacemos lo que sentimos sino lo que se vea mejor a los ojos del mundo.
Hay que dejar de vivir en la justificación, hacer las cosas para quedar bien y solo cumplir compromisos, es un llamado urgente a conciliar la paz interior; en mi caso es lo que estoy haciendo, al menos lo que quiero lograr.
Me he visto gastando demasiada energía tratando de quedar bien con otros, cuando en realidad lo que quiero es salir de ese espacio. Eso agota, es matador.

Hoy sigo agradeciendo el aprendizaje y a través de este agradecimiento queda en evidencia el camino andado, es maravilloso. 


Ser respetuoso y aprender a decir no, sostenerlo y seguir. 

Vamos.

Gaby.